miércoles, 23 de noviembre de 2016

EL ORIGEN DEL GHETTO JUDÍO: SEPARACIÓN E INTEGRACIÓN SOCIAL


EL origen del GHETTO JUDÍO: Separación e Integración social


                                         Primer Ghetto, Venecia 1492.
La creación e implementación del primer ghetto judío –en Venecia- se puede fijar cerca del año 1492 y calza con la expulsión y consecuente inmigración de la población judía residente en España a la fecha en que estos fueron expulsados por la monarquía de dicho país.
La absorción por parte de la comunidad italiana de sus símiles españoles (franceses e incluso alemanes) no fue fácil y provocó una fuerte crisis de identidad en una comunidad que se encontraba construida sobre una base más común que la que tuvieron que compartir con el nuevo contingente de judíos llegados de otros países y en la cual Italia se transforma en un verdadero centro de la vida judía europea. Todos estos hechos deben ser considerados en el contexto histórico de la época: un mundo sumido en cambios radicales y de bastante alboroto por lo que estaba ocurriendo con el descubrimiento de América, el Renacimiento, la Reforma y la Contra Reforma.
El primer Ghetto, como ya mencionamos, se creó en la ciudad de Venecia en el año 1516 y el significado mismo de la palabra no tiene la connotación negativa que le atribuimos hoy en día.
La palabra Ghetto parece tener su origen en el vocablo “guettare” que significa fundir y guardaba referencia a la fundición de acero que estaba ubicada en el lugar que le da origen a su nombre. Otra teoría establece que el término proviene del hebreo “Guett” que significa divorcio y se aplica al lugar que le dio origen al “divorcio” entre el judaísmo y el resto de la sociedad.
La distinción anterior no es casual y da cuenta de una gran diferencia existente en los historiadores judíos: Por una parte, están quienes creen que en efecto el Ghetto judío significó una separación y aislamiento hermético del judaísmo respecto de la sociedad, que comienza con la Contrarreforma de la Iglesia y su lucha ofensiva contra los protestantes y los judíos, y que como paso siguiente llevaron a la creación de los Ghettos como lugares para aislar a los judíos de la sociedad. Esto llevó a la construcción de una nueva cultura judía aislada en sí misma y herméticamente cerrada a Occidente y que da pie para el surgimiento de la Cabalá o de tendencias más místicas del judaísmo como el Jasidismo o los movimientos mesiánicos.
Por otra parte, también existe una corriente de pensamiento que plantea que el Ghetto supuso un lugar de intercambio y permeabilidad entre el mundo judío y el mundo no judío, que no es descabellada considerando, por ejemplo, que el Ghetto de Venecia se encontraba en el centro de la ciudad y no aislado, cosa que parece al menos curiosa si consideramos que su fin era aislar a los judíos.
De esta forma, se va creando una identidad en torno al Ghetto como un lugar común de los judíos.  En otras palabras, los judíos se encontraban acostumbrados a ser expulsados de los lugares donde se encontraban (Alemania, España, Portugal) y al estar reunidos viviendo en un Ghetto, dicho lugar pasó a ocupar un lugar netamente judío donde el individuo se podía reconocer a sí mismo en un ambiente judío. Aunque se trate de un lugar sucio, apretado, pequeño y obscuro; se trata de un lugar.
Desde una óptica no judía, el Ghetto también supone un reconocimiento de un espacio judío determinado dentro de la geografía nacional italiana que puede pasar casi desapercibido. Por un lado, el judío se queja de que le ordenen vivir en un lugar cerrado, pero por otro lado, debemos pensar que dicho lugar –aunque cerrado- supone un reconocimiento a la comunidad judía como ente intermedio de una sociedad italiana cambiante, y al hacerlo, de una forma casi paradójica, se le reconoce a dicho colectivo el derecho de vivir en su lugar y con su gente. Pero este derecho se convirtió con el tiempo en un deber.

lunes, 27 de agosto de 2012

La hirsuta barba del Sionismo

   
Si me piden que dibuje el Sionismo me vería en serios apuros: Por una parte me costaría dar con EL dibujo que resuma lo que entiendo por Sionismo y por otro lado, me sería muy dificil -dadas mis incapacidades artísticas- de dibujar lo que entiendo por Sionismo.
    Si me piden que dibuje el Sionismo, me tendría que armar de paciencia para dibujar un rostro con barba ¡Así de simple!
   Para mi el Sionismo tiene rostro y ese rostro tiene una hirsuta barba negra.  Para mi, el Sionismo en imágen es sinónimo de Theodoro Herzl, aquel periodista húngaro que por cubrir el caso Dreyfuss se empapó de un extraño sentido de pertenencia que degeneró en lo que conocemos como el brazo político del Sionismo.
   Herzl siempre supo que la propaganda era un factor de suma relevancia en lo que a propagación de ideas respecta y por lo mismo se dedicó a pulir su pulcra y reconocible imágen en pos de que esta sea finalmente identificada como un sinónimo del Sionismo Político, pues una imágen vale más que mil palabras y un rostro con barba puede decirnos lo mismo que un folleto explicativo de tal o cual tendencia.
   El trabajo de marketing de Herzl fue notable: Hizo de si mismo un rostro de campaña y LA campaña misma, que aunque puede arrojar ciertos atisbos de soberbia, creo que dentro de todo se trata de una genialidad; de la capacidad de vender una ideología a través de la mera imágen del ideólogo detrás de ella.


martes, 8 de marzo de 2011

Paradoja Informativa

                                                            
Hace algo así como una semana, a la hora en la que la familia se reúne a ver los "acontecimientos del día" contados por gente de rostro bonito, vi un reportaje que mostraba la nueva técnica del crimen des-organizado de nuestro país que consiste en que un sujeto agachado, se acerca a un auto, rompe con un fuerte golpe el vidrio de la ventana del copiloto y se lleva la cartera de la dama, el bolso del estudiante o el maletín del ejecutivo.

  El desarrollo del reportaje apunta a tomar consciencia de esta nueva forma de delincuencia y prevenirla de la mejor manera:  Guardando sus efectos personales en la maleta del auto o dejándolos tapados de la vista de malhechores.

  Hasta aquí todo bien.

  Hoy en la noche, volviendo de una comida familiar, en la esquina de Manquehue con Bilbao, mientras nos encontrábamos detenidos en la luz roja de un semáforo, vimos como al auto de adelante se acercaba un tipo medio agachado.

  Con el conocimiento que tengo de mis amigos, supuse que podría ser un amigo haciéndole una broma a otro o tratándole de curar el hipo a través vieja técnica del susto, pero poco después, me pareció que el tipo miraba la ventana con actitud de pedir monedas.   No alcanzó a parecerme sospechoso cuando golpeó la ventana, tomó una cartera y se esfumó de mi vista en menos tiempo del que me demoró en tipear desde "No alcanzó..." (para estos efectos, me considero una persona que tipea a velocidad promedio).
  Obvio que no alcancé a reaccionar y cuando miré, el tipo se había borrado.

  Lo que me vino a la mente cuando salí de mi impresión, fue que probablemente el tipo había visto el mismo reportaje que yo, pero a diferencia de mi, que me representé la posibilidad de guardar mis cosas en la maleta, él, del otro lado de su tele, se representó la posibilidad de salir a probar esta nueva técnica para robar y quizás lo hizo.

viernes, 10 de diciembre de 2010

La (fren)ética Periodística

  
Escribo estas líneas mientras escucho las bocinas y veo pasar la caravana de micros que despiden a uno de los presos que falleció en el incendio de la cárcel.
   Este "lado b" no fue cubierto por la prensa.
   Hace ya mucho tiempo que creo que la televisión se chacreó.  Ni siquiera creo que vale la pena hacer un análisis de la evolución (a todas luces involución) que sufrió por ejemplo MTV o la serie de acontecimientos que engendraron un monstruo como Yingo.   (Aunque quizás tengo cierto grado de envidia por no poder pertenecer al elenco del show).
    Por lo contrario, creo que las noticias si son espacios de la parrilla televisiva que merecen la pena algunos comentarios.   Hace ya bastante tiempo que me chatié de ellos, pero la gota que rebalsó el vaso, fue la cobertura que hubo respecto a los mineros:  Llegó un día en que no supe si lo que estaba viendo era la cobertura noticiosa de un evento que conmocionó al país o si se trataba simplemente de las transmisiones desde la "cueva estudio".    En fin, preferí perderme ese reality; eso lo encuentro no-tan-agradable.
   Lo que encuentro totalmente rechazable, es la cobertura que se le dio al incendio de la prisión de San Miguel, o mejor dicho, la descarnada persecución por parte de los periodistas contra los familiares y amigos de aquellas personas que injustificadamente (o justificadamente para aquellos conservadores de fuste) murieron quemados en un incendio.

   Lo que presencié el poco rato que miré la tele, fue una frenética (de acuerdo a la RAE, lleno de furia y rabia) persecución por parte de los periodistas en la que los principios de la ética -ya ni siquiera profesional- se vieron totalmente olvidados, sacando la parte más morbosa que la transformación de una tragedia en espectáculo podía brindar.
    Creo que es pertinente concluir esto dejando en claro -a modo de mea culpa- que el morbo vende porque gente como nosotros lo compra, así que no agachemos la cabeza: Simplemente apaguemos la tele!
http://www.youtube.com/watch?v=5iFCl7anN0Y

jueves, 29 de julio de 2010

I-Doser: ¿Audio-droga?

                                                 
     Leí en Emol un artículo que básicamente hablaba de "jóvenes estudiantes que se drogan escuchando frecuencias sonoras" y la verdad es que me bajó rápido la curiosidad.
    Para comenzar, no conozco ningún dealer sonoro, por lo que recurrí a mi fiel y viejo amigo Soulseek para buscar i-dose.   Bajé una carpeta con diversos archivos y ahora faltaba sólo probarlos.
   Para los que no saben (o no me conocen), me encuentro en un periodo de total abstinencia de sustancias que alteran la percepción de la realidad (llamado examen de grado) por lo que casi no consumo ni alcohol desde hace ya un buen tiempo.
    Aclarado lo anterior, descartamos de inmediato todos los audios cuyos nombres tenían que ver con la Marihuana e incluso el Alcohol (las drogas "más duras" quedaron descartadas a priori: nunca he probado la real, menos lo haré vía auditiva), quedando como mejor opción una que se llamaba Brain+, que según se describía, abriría mi capacidad cerebral para llegar a plantearme incluso cuestiones trascendentales.    Elegí la recién descrita porque me llamó mucho la atención que un audio fuera capaz de provocar esos efectos y porque me considero una persona que suele realizarse preguntas trascendentales, por lo que estimé este audio como a la vez inofensivo e interesante.
    Sustituí una pequeña power nap por una media hora de estar "eshao" en mi cama con mi par de audífonos siderales escuchando una frecuencia de sonido aguda y mega-monótona.
    A ratos mi atención se desviaba de la frecuencia y a ratos hasta creo que ronqué.  Y si bien no sentí nada especial respecto al audio en cuestión, de esa experiencia nació la idea de hacer este blog.

Redes de Soledad Social

      Luego de una charla con un par de amigos decidimos hacer un inofensivo y pequeño experimento:
      Estoy de cumpleaños el día 27 de febrero, un día que lamentablemente se tornó inolvidable, pero que con un par de clicks reemplacé en Facebook por el día 6 de julio sin avisarle a nadie salvo a los 2 amigos con los que fragüé el inocente –pero maquiavélico- plan:
De mis 848 “amigos de Facebook”, un total de 225 adoptaron un comportamiento activo. De esos, 162 efectivamente pensaron que era mi cumpleaños y me dejaron “sus más sinceros deseos” de felicidades en mi día; incluso recibí una llamada telefónica de una persona que 4 meses antes me había deseado lo mismo que ese día Por otra parte, 63 se dieron cuenta del error y siguieron la corriente o me increparon en privado
Si bien a priori se podría hablar de un inocuo experimento, los resultados arrojados me dejaron perplejo. La reacción de la gente y la impersonalidad de las redes sociales provoca un distanciamiento enorme en las relaciones interpersonales, y si bien mi vida no se reduce a Facebook, al parecer, la relación con más de una persona que consideraba relativamente cercana (considerando a alguien relativamente cercano con quien tengo una relación de reciprocidad en el conocimiento de nuestras fechas de cumpleaños) es más una relación de red social que una relación verdaderamente social.
Conversando luego con otro amigo, en un momento de máxima inspiración, me contó una reflexión que no puedo sacarme de la cabeza: Su conclusión fue que las "redes" sociales, aparte de tejer contactos entre las personas, provocan un efecto similar al de las redes de los pescadores que sacan al pez de su entorno para ponerlo en un ambiente totalmente ajeno, donde el pez, finalmente, también termina enajenado. Lo mismo nos ocurre a nosotros, que día a dia (me incluyo) nos fiamos -sin cuestionarnos- de una red social que nos conecta con otras personas de una manera bastante fría.